Es muy importante almacenar el vino en forma correcta para aprovechar todas sus cualidades, y los expositores de vino hacen lo propio, los hay de todas las maneras posibles, siempre tendremos que tener en cuenta para que local de ventas o para que lo necesitamos. Puede ser para nuestra casa, que en ese caso los de maderas hechas a medida son muy lindos, después también esta en donde colocaremos los expositores de vino, si en la cocina o en el living o en el lugar en donde nos encontramos con los amigos. Podemos estar necesitando expositores de vino para un restaurante, que en este caso, las medidas deben ser grandes para justamente mostrar los vinos que allí se comercializan, de una manera muy elegante y delicada, las luces y la forma de acomodarlos son muy importantes.
Por lo general se colocan sobre una pared de grandes dimensiones, en madera en los en cada hueco, se inserta una botella de cada vino, si estos están bien dispuestos, lucirán perfectos. Para los exhibidores de vino, podemos pensar en dejarlos a temperatura ambiente o bien refrigerarlos en las cavas, que son heladeras para botellas de vino, eso es a criterio de cada uno, pero lo cierto es que en un buen restaurante, la idea es que el expositor sea elegante, porque elegante será el restaurante, es decir que esto le otorgará prestigio e importancia. Una cava para vinos, puede ser para catorce botellas o para doscientas, siempre habrá una de acuerdo a nuestras necesidades. Las botellas de vinos deben acomodarse apoyadas sobre un lado, en un lugar preferentemente tranquilo, y oscuro y un poco húmedo, a una temperatura de alrededor de 8 a 13 grados centígrados. Idealmente, las botellas deben ser dadas vuelta cada algunos meses. Si no se mantienen estas condiciones, el vino envejecerá más rápido. Los expositores de vino, son muy importantes, tanto como lo es la temperatura ambiente, que si esta fluctúa, las botellas están expuestas a la luz o sujetas a vibraciones, el vino no envejecerá bien. Sin embargo no todos los vinos pueden almacenarse por un tiempo largo. Algunos pierden su vigor si se los almacena durante mucho tiempo. En reglas generales, es mejor abrir un vino demasiado temprano que mantenerlo almacenado y descubrir que es demasiado tarde y que se ha convertido en una bebida intomable. Por eso para tener una bodega en buenas condiciones, pueden organizarse las botellas según su añejamiento óptimo.
